Ciénaga de Zapata: descanso de cocodrilos

La Ciénaga de Zapata está a casi 3 horas de camino desde Varadero, unos 140 kilómetros, si no te pierdes. La vía que nosotras tomamos fue la de Cárdenas, pasando por Jovellanos. El camino es un poco cansino e incluso tendrán que cruzar la Autopista Central con sus 8 carriles. Se puede hacer. Sí. Está dentro de la legalidad cruzar la autopista. Hasta que lleguemos a Jaguey Grande, encontraremos infinitos campos de caña de azúcar.

Caña de azúcar

El zapato de Cuba

Parece que no acaban nunca. Te paras, preguntas al cubano y te dice….»por Australia, por Australia». Y tu, que no conoces de qué hablan, piensas «…sí. Como siga circulando llego a Australia, pero a la de verdad, al continente…». Se refieren a la gran central del Ejército donde se concentraron las milicias cuando tuvo lugar el conocido ataque de Bahía Cochinos en 1961 ( o también llamado desembarco de Playa Girón).

Bahía de Cochinos

Una gran zona verde

Cuando llegas a la zona te das cuenta que estás entrando en un gran parque natural y, como no, nacional. Es una gran península con forma de zapato en la que apenas viven personas (dicen las estadísticas que 6 por cada kilómetros cuadrado). Allí quien reina es el cocodrilo. Y los puedes conocer en la Boca de Guamá. Aquí se encontrarán con restaurantes, con criaderos y con una inmensa laguna donde la vida se esconde bajo opacas aguas marrones (si quieren amenizar la lectura con notas musicales no duden en buscar el tema «Rita la Caimana» de Los Compadres de Cuba….jejejejejeje…).

Detalle ojo cocodrilo

Los cocodrilos cubanos tienen algunas peculiaridades. Todas ellas te las explicarán con detalles los expertos. Pueden llegar a ser centenarios, se mueven lentos y con sigilo. Te observan sin mirar, te vigilan sin anunciar. ¡Y si pueden, te muerden sin querer asustar!. Te dejarán tocarlos y te permitirán, previo pago de 1 CUC, sacarles fotos.

Cocodrilos

Incluso te piden algún CUC más si quieres observar como los grandes cocodrilos devoran carne cruda. Es una visita obligada, la de los bichos y su negocio paralelo. Tendrán ofertas variadas. Otras alternativas también apuntan a la Cueva de los Peces en la que, si lo desean, podrán sumergirse con trajes de buzo.

Nubes de tormentas

Naturaleza en Zapata

Al que le guste el trekking, la Ciénaga de Zapata es el lugar ideal junto con Viñales. Es una reserva natural en la que hay numerosos endemismos, animales y humedales. La zona en general es pantanosa. A medida que te vas adentrando en esta parte de la isla, el verde se va intensificando. La jungla se vuelve más frondosa y cuando cae el sol, las libélulas se van literalmente «suicidando» contra los cristales de nuestro vehículo. Impresionante la gran cantidad de insectos que  nos encontramos en este lugar, incluso con un escorpión, que asustó a Margarita bajo una rueda de nuestro coche.

Cocodrilo Dundee

Alojamiento en Zapata

Optamos por alojarnos, sí,  en Casa Margarita, la que se asustó con el escorpión. Su vivienda está en Playa Larga y, aunque no es fácil de localizar, si quedas con ella previamente, seguro que te encontrará. Su casa se ubica frente al hotel de Playa Larga, entrando por un camino de tierra. Nos cobró 20 CUC la noche incluyendo un desayuno muy variado y riquísimo. También ofrece comidas y cenas. La verdad es que cocina muy bien la doña. Con ella probamos la langosta asada, por 8 CUC. ( ¿Como quieren la langosta, grillé o guisada?).

Casa Margarita

Margarita nos contó que quería hacer una especie de parque zoológico en su terreno pero que los impuestos de los Castros se lo ponían cada vez más difícil. Por eso tiene dos habitaciones para turistas que alquila cuando puede.

Bahía de Cochinos

Playa Larga es un lugar sin apenas atractivo. Es conocida porque está justo en el centro de la más que famosa Bahía de Cochinos. El paisaje es totalmente diferente al resto de Cuba. Las playas tienen la arena más oscura y la vegetación es mucho más frondosa. La temperatura es muchísimo más fresca que en el resto de la isla pero, aún así, agradablemente templada.

Playa Larga

Ciénaga verde y lluviosa

Nuestro paso por la Ciénaga estuvo marcado por una gran tormenta. ¿De qué me extraño? Durante todo el verano de 2015 Cuba sufrió una terrible ola de calor. Todos nos contaron que en lugares como La Habana, se alcanzaron temperaturas de 40 grados con humedad del 100 por cien. No quiero imaginarme en Santiago, donde el calor era brutal. Fue tal el sopor, que para paliar los efectos de la sequía, el Gobierno cubano comenzó un programa de lluvia artificial el 15 de septiembre, justo al día siguiente de nosotras llegar. Doy fe. Todos los días a la misma hora comenzaba a caer agua del cielo. Margarita nos decía que éramos las mujeres que habíamos traído la lluvia. No sabía que todo estaba planificado y no precisamente por nosotras.

«…se mueven lentos y con sigilo, te observan sin mirar, te vigilan sin anunciar…»