El Nido: visita obligada en Filipinas

Si hay un lugar que no hay que perderse en Filipinas, siempre desde mi punto de vista, ese es El Nido. Y básicamente por un motivo: el paisaje. Lo visité casi en el ecuador del viaje y cuando empezaba a pensar que muy pocas cosas me sorprendían, llegamos allí. Me detuve, me senté, miré al frente y pensé: solo por esto vale la pena venir a Filipinas.

Para llegar a El Nido viajamos desde Bohol hasta Puerto Princesa. Y desde allí, pillamos una guagua, hasta el final del destino. Fue un trayecto ciertamente peligroso y un tanto desagradable. Sin aire acondicionado pero con ventanillas abiertas. Casi 6 horas de viaje, con numerosas paradas, con incertidumbres, un camino a través de las montañas, de noche. ¡Uf!. 350 Pesos nos costó este billete al infierno. Grabé aquel trayecto en la carpeta cerebral de «Momentos de mi vida peligrosos pero superados con destacable éxito». En fin. Después de un viaje difícil, llegamos a Corong Corong, en El Nido. Más de 270 kilómetros de camino. Hay un aeropuerto muy pequeño allí pero es muy difícil conseguir avioneta para volar.

La Town, al abrigo de acantilados espectaculares

El Nido no es solo la casa de los pájaros

El Nido es un lugar de costa. Con playas, con una bahía espectacular y con muchos barcos. No deja de ser un sitio turístico pero aún sin explotar. ¿Cosas que saber de El Nido?. Atención porque muchas veces se va la luz, algo que dificulta que puedas cargar bien la batería de tu cámara, internet funciona fatal, etcétera. En ocasiones es casi imposible conectarse. ¿Cajeros automáticos? Hay tres pero….no nos funcionó ninguno así que mejor llevar dinero en efectivo suficiente para los días que vayas a pasar allí y también para el siguiente destino. Cuenta con la meteorología adversa. Si hay mala mar no podrás viajar en barco y tendrías que dar la vuelta en guagua, otras 6 horas de trayecto infernal hacia Puerto Princesa.

Aguas cristalinas, dicen que las mejores del mundo

Un rincón de Palawan

Y después de todo lo chungo, vamos a lo realmente maravilloso. El Nido está al norte de la isla de Palawan y es uno de los lugares más espectaculares del mundo, al menos que yo haya visto. Como su propio nombre indica es una especie de nido de pájaro formado por múltiples islas que acogen a la bahía. Un nido en el que anidan unas aves propias de las Filipinas,  y que encuentran en el Archipiélago Bacuit el mejor hogar. Islas calizas que han formado sorprendentes lagunas, islas que esconden rincones inaccesibles, playas de ensueño, fondos submarinos vírgenes, pasadizos marinos, todo lo que puedan imaginar lo encontrarán en El Nido.

Atardecer desde la playa de Las Cabañas

El pueblo en sí, la town, básicamente está formado por 3 calles. La Rizal, Serena y Hama. Es donde se concentra el mayor número de bares, restaurantes y locales. Está un tanto saturado y lo ideal es combinar el descanso con la «movida».

Calles de El Nido, una vida sencilla

Qué ver en El Nido

Para conocer estos rincones maravillosos tendrás la opción de hacer 4 rutas ya preestablecidas. Todas incluyen varias paradas y es casi imposible no apuntarse a más de una. De la A a la D, prácticamente en todas las empresas encontrarás lo mismo por precios similares. Uno de los más completos es el C. Unos 1400 Pesos por persona con la comida incluida. A todos los precios le tendrás que sumar el ETDF, el Eco Tourim Developmet Fee. En 2008 se estableció que para cuidar el medio ambiente se tenía que cobrar un impuesto que se usa para proteger y limitar el impacto del turismo en el Medio Ambiente. El 10 por ciento de ese impuesto se destina a la protección del área, el 75 por ciento para proyectos turísticos en El Nido y el 15 por ciento para la Fundación General del Gobierno. Todo esto lo podrán ver con más detalles en www.elnidotourism.com.

Lo mejor de El Nido, el paisaje

Todas las rutas parten del puerto de El Nido y se hacen en bangka, que es un barco tradicional filipino con las dos barras de bambú laterales para lograr estabilidad. Si mareas, ya sabes: biodramina. Nada más salir del puerto empezarás a sorprenderte por las formaciones rocosas y calizas. Pequeñas islas con lagos interiores, cuevas espectaculares, fondos marinos azules como el cielo….acantilados imposibles.

Aguas transparentes

Visitas obligadas

Una de las visitas seguras son las lagunas. Tendrás la pequeña, la Small Lagoon, a ella entras por  Miniloc Island. Podrás hacer snorkel y kayak. También te puedes quedar en el barco y admirar la belleza desde ese punto de vista.

Otra de las estampas típicas es la Big Lagoon. Entras por un impresionante pasillo de arena blanca y el agua es muy poco profunda. Si tienes la suerte de tener un día soleado te llevarás las imágenes más bellas que hayas sacado nunca con tu cámara de fotos.

En El Nido se puede hacer paddle surf, buceo, snorkel…

La Secret Lagoon es otra de las joyas de la corona. Es una laguna a la que accedes por un hueco en una roca. Una entrada un tanto peligrosa por el oleaje pero vale la pena. Si se acumula mucha gente dentro puede ser un poco agobiante pero aún así, entra. 

Durante todos los tours irás pasando por islas, islotes y lugares paradisíacos. Te incluye la comida que se suele ofrecer en Shimizu Island. Es muy abundante y variada. 

Filipinos jugando en el agua

Corong Corong

También pasarás por la divertida Seven Commandos, una isla en la se han preparado algunas iniciativas de ocio muy simples para sacar dinerito al turista. Te puedes lanzar de un árbol, sacarte fotos peculiares… Pero bueno, tiene su historia y nos ocuparemos de buscar en google qué relación tiene con la Segunda Guerra Mundial.

Ya en tierra, muy cerca de Corong-Corong, se encuentra la playa de las Cabanas, famosa por sus paisajes, por sus atardeceres exuberantes y por las terrazas chill-out. Ir hasta allí te costará I/V unos 250 pesos. Está cerca, a 10 minutos en triciclo. Allí se podrán tomar un rico jugo de calimansi (una especie de lima) o una San Miguel fresquita. Ojo, porque en el fondo del mar hay muchos restos de piche (petróleo).

Jugo de calimansi

Dónde alojarse en El Nido

En El Nido estuvimos varios días. El primero de ellos nos alojamos en Resort Palau-Yu, en la zona de Corong-Corong. Es mucho más tranquila que el resto pero el hotel, sinceramente, dejaba mucho que desear para su precio. Una habitación por 32 euros. También nos quedamos en La Mina Grande, unas cabañas más cerca de la town y prácticamente en la playa. Nos costó 600 Pesos por noche pero la wifi funcionaba, como en todos lo lugares en general, muy mal. Era bastante modesto pero pasable. Nos visitó una «tarántula» en el baño que casi nos mata del infarto.

También nos alojamos una noche en Tandykan House. Justo en el frente de la bahía, en plena playa.  1000 Pesos por noche para dos personas con baño incluido en la habitación.

Para comer se encontrarán múltiples opciones. En OG,Z Restaurant, muy cerca de la playa. También el SeaSide Restaurant, donde además, podrán contratar los tours de Umi (una empresa japonesa que funciona muy bien). Hay otro local muy cerca de la playa que es de un belga en el que desayunamos muy a gusto unos bocatas de tortilla francesa, como no podía ser de otra manera, por 120 Pesos. Para salir a echar unos dancing también en la playa, en Kaban. Música en directo y diversión asegurada.

«..me detuve, miré al frente y pensé: solo por esto vale la pena venir…»