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Radazul es una zona de costa ubicada en el municipio de El Rosario, en Tenerife, y se ha convertido en un imprescindible del verano por varias cuestiones. Al menos para mí. Está muy cerca del área metropolitana y, aunque es ciertamente difícil encontrar un aparcamiento los días soleados (casi siempre), yo siempre me aventuro y encuentro algún hueco donde dejar el coche (no me digan por qué, pero siempre aparco casi a la primera).
Submarinistas al agua
Antiguamente Radazul era conocido por su marina donde muchos tenían anclados sus barcos. La zona habilitada para el baño era escasa, con muchas rocas y bastante incómoda. Desde que la reformaron la cosa cambió de forma radical porque, además de la zona de baño de siempre, se logró crear dos pequeñas playas donde pueden disfrutar también los más pequeños de la casa. Esto ocurrió aproximadamente en 2010. Nadie imaginaba que donde antes solo había roca, ahora exista una infraestructura perfectamente válida para pasar un día de playa bajo el sol tinerfeño.
Patitos al agua
La gran explanada tiene varios accesos al mar a través de al menos 3 o 4 escaleras, que yo recuerde ahora. Dos playas, un parque infantil y un interesante solarium con tarimas de madera donde te puedes tumbar para que «Lorenzo» te requeme un poco. Radazul está conectada con la Playa de la Nea a través de un paseo que viene estupendo para caminar o correr. ¿Cosas positivas por las cuales ir a Radazul?. Lo primero es lo cerca que está de la capital tinerfeña. En apenas 10 o 15 minutos tienes la opción de darte un baño en aguas limpias, de salir sin arena, y lo mejor de todo: apenas hay turistas porque no se trata de una zona especialmente promocionada en los circuitos habituales.0
Casetita de los libros en Radazul
Hasta aquí las cositas positivas pero también existen las negativas como en todo. La falta de aparcamiento es la primera, desde luego. La segunda es un excesivo control de la Policía Local a la hora de buscar aparcamiento (me han amenazado con multas por saltarme una raya contínua…además un efectivo con una especial e innata antipatía). Y a esto habría que sumar algunas deficiencias en la infraestructura por el paso del tiempo, pocos socorristas y los servicios (que no se si no existen o están cerrados).
Les sugiero, a pesar de todo, al menos 5 cosas que pueden hacer en este rincón de la costa tinerfeña. 5 aunque podrían ser muchas más. En Radazul se pueden hacer muchas más cosas.
Escaleras de acceso a la zona de baño
1-Deportes acuáticos
Es el sitio ideal para iniciarte en algunos deportes acuáticos como el submarinismo. Cada vez hay más empresas que se dedican al buceo porque tiene unos fondos marinos limpios. La zona también tiene algunas infraestructuras para hacer más confortable la práctica de este deporte. Zonas acotadas para que los submarinistas pongan sus trajes, sus bombonas y también para recibir las clases e indicaciones de los profesores.
En los últimos años también se puede hacer paddle surf porque en ocasiones el agua es muy calmada. Y el snorkel está más que garantizado porque hay numerosos pescaditos muy cerca de la costa.
Curso de buceo
Si son más arriesgados, también podrán adentrarse en el mundo de la apnea. Varias empresas te dan la oportunidad de formarte y ser expertos. Allí te encontrarás casi con toda probabilidad a la grande entre las grandes Dunia Quintero, amiga, periodista y campeona de España y cuarta del mundo en apnea estática. Entrena y trabaja en la zona.
Solarium de madera y piedra….hay salvavidas
2-Cañas en El Tamboril
Es uno de los atractivos de los últimos años y es de las pocas ofertas gastronómicas, al menos cerca de la costa. Lo mejor son las cañas de cerveza a 1 euro. Al lado del mar y con los calores del verano, no me dirán que una caña no es apetecible. Una o dos o tres si se tercia. Allí también hacen café, se sirven copas y algo de picoteo. Y todo con música medio tropical, medio pachanguera, medio comercial…música al fin y al cabo.
El Tamboril, a pie de playa
3-Nadar y tomar el sol
Por descontado será el objetivo principal de tu visita a Radazul. Darte un baño, nadar y relajarse al sol. Para ello cuentas con varias zonas donde estirar la toalla y sentar nuestras posaderas. Las más demandadas son las tarimas de madera, amplias y relativamente cómodas. Por eso hay que ir tempranito a la playa (además de que hay que buscar aparcamiento). Se puede nadar a lo largo de toda la costa con total seguridad porque la zona está acotada. Les recomiendo escarpines porque las escaleras suelen tener musgo y pueden resbalar.
Nadar entre aguas cristalinas
4-Leer y jugar
Estirado bajo el sol se puede escuchar música, hablar con los amigos, o relajarse leyendo. Y si nos hemos dejado atrás el libro no se preocupen porque es uno de los lugares de playa en los que hay una pequeña biblioteca al aire libre donde siempre hay varios ejemplares de publicaciones. La cuestión está en que cuides los ejemplares, los disfrutes y que incluso te lo lleves a casa para terminar de leerlos. Me han aclarado los responsables de la minibiblioteca que están abiertos a la recepción de más publicaciones. Lectura compartida. Iniciativa muy aplaudida.
Leer y jugar. Jugar porque hay un parque infantil muy completo con suelo de arena de playa y con columpios adaptados para todas las edades.
Kiosco El Tamboril donde tomarte un mojito
5-Navegar
No hay mar sin barcos y precisamente Radazul es conocido por la marina que durante años ha servido para anclar los veleros, yates y pequeñas naves de los chicharreros. Se trata de un muelle con unos 200 amarres. Se puede practicar vela, se imparten cursos. Septiembre siempre será un mes ideal para aprender porque es el menos ventoso, pero bueno, la cosa está en preguntar a un buen profesor.
Barcos entrando al Puerto de Radazul
No les faltarán motivos para darse un paseo por Radazul ¿verdad?. Muy cerca de la entrada del puerto deportivo hay algunas pizzerías que llevan años. Son ricas, nada caras y se puede barajar como alternativa para comer cerca del mar. Muy agradable.
«…se ha convertido en un imprescindible del verano…»