Llegan las vacaciones y por tanto, la época de mayor trasiego en los aeropuertos. Nos vamos de viaje. Puede que a solo unos kilómetros de distancia, o puede que allende los mares. Puede que no ahora sino en los puentes de mayo o en verano. Sea cerca o lejos hay unos derechos que debemos aprender para poder recordar siempre. Estas son las recomendaciones esenciales que nos ofrece nuestra compañera Belén Molina de la web especializada legalaria.com
Busque y compare. Planificar el viaje con antelación es la mejor garantía de éxito. Busque y compare precios entre diferentes compañías aéreas para encontrar la que mejor se adapte a sus deseos (como es el volumen de equipaje que pretende llevar) y horarios de llegada y salida. Si se pone en manos de una agencia de viajes podrá comparar presupuestos. También las categorías de hoteles y destinos. No olvide pedir que le entreguen por escrito las condiciones contratadas para poder reclamar en caso de incumplimientos.
La importancia de las hojas de reclamaciones. Son el instrumento que le permitirá ejercer sus derechos en caso de que disconformidad con el hotel en el que nos alojamos o cualquier otra condición de su viaje. Deben solicitarse y presentarse en el momento en que surja el problema. Por ejemplo,si la habitación del hotel no tiene vistas al mar, como habíamos solicitado, la reclamación debe presentarse en el mismo hotel. Aunque el viaje se haya organizado con una agencia de viajes tendrá que registrarse allí. Si es ésta la que ha cometido el error, el hotel ya se ocupará de reclamar a la propia agencia, aunque usted también lo haga. Recuerde que en la UE todo establecimiento esta obligado a entregarle la hoja de reclamaciones sin dilaciones ni excusas.
Derecho a indemnización por retrasos en los vuelos o pérdida de equipaje. Son derechos que atañen a todos los pasajeros y todas las compañías aéreas. Solo se pierde el derecho a una indemnización si la contingencia se debe a causas inevitables como son los fenómenos meteorológicos o las catástrofes.
Las indemnizaciones por retrasos varían en función del tiempo y la distancia, entre dos horas de retraso para distancias de hasta 1.500 kilómetros. Tres horas de retraso para distancias hasta 3.500 kilómetros, y cuatro horas o más para los restantes vuelos. Los retrasos de tres a cinco horas dan derecho a indemnizaciones de entre 250 y 600 euros y si supera las cinco horas hay derecho al reembolso íntegro del billete.
En todos los aeropuertos de la Unión Europea hay hojas de reclamaciones y personal que le atenderá en la defensa de sus derechos. Recuerde que las reclamaciones deben interponerse en el mismo aeropuerto en el que se originó el retraso o la cancelación del vuelo, y no en el de destino. Tampoco debe esperar regresar de sus vacaciones para hacer valer sus derechos. Debe ser en el momento y lugar del incidente.
Contratos por internet y efectos de la publicidad. La adquisición de bienes y servicios, como puede ser un viaje, a través de páginas web no limita los derechos de los consumidores sino que estos están protegidos por la Ley General para Defensa de Consumidores y Usuarios y la Ley de Comercio electrónico. Como en todo, nuestras reclamaciones deben respaldarse con pruebas. La publicidad de un hotel o de un viaje organizado tienen carácter contractual, por lo que es muy recomendable hacer impresión de pantalla del servicio que vayamos a contratar o sencillamente imprimir la publicidad de la página web.
Para aprovechar al máximo su viaje infórmese antes del destino al que se dirige. No solo de las posibles visitas a lugares de interés, horarios y precios de museos u otros establecimientos, sino también de las condiciones meteorológicas. También del precio medio de bebidas y comidas, o, en caso de que visite un país en el que se profesa el islamismo, si es periodo de Ramadán. Ello condicionará los horarios comerciales.
En ocasiones es recomendable contratar un seguro de viajes pero, como con todos los seguros, antes de firmarlo conviene fijarse detenidamente en sus excepciones y limitaciones si quiere evitar sorpresas desagradables. También debemos tener en cuenta que si tenemos un seguro privado, en algunos casos, también se da cierta cobertura en algunos países pero no en todos. Con todas estas recomendaciones solo queda disfrutar del trayecto, del destino y también, como no, de los preparativos.
«…tener en cuenta los derechos que tienen los usuarios ante cualquier irregularidad…»
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